Su adicción a la piedra bruja y una confianza en sí mismo que raya la locura (incluso para un Skaven) son los rasgos distintivos de Thanquol. Aunque la mayoría de sus planes terminan mal, se ha convertido en un maestro en el arte de aprovechar los desastres a su favor, y también en destruir los cuerpos y mentes de sus detractores gracias a sus poderosos hechizos. Thanquol siempre va acompañado de su colosal Rata Ogor, al que llama Destripahuesos.