Sin mente, y regidos únicamente por un instinto colectivo, las migraciones zombis se han convertido en una plaga sempiterna tras el necroseísmo. Muchas ciudad han creado “pirobandas” errantes que purgan con fuego los brotes antes de que sea demasiado tarde.
A pesar de que de manera individual son lentos, torpes y frágiles, una manada de Deadwalker Zombies del tamaño adecuado puede suponer una amenaza incluso para los soldados enemigos más habilidosos, simplemente por su superioridad numérica. Su hambre mononeuronal les da un componente de velocidad sorprendente cuando la presa se acerca demasiado, y cualquier desafortunado que caiga en sus garras acabará por unirse a los rangos Soulblight antes de que acabe la batalla.
En el interior de esta caja encontrarás 94 componentes de plástico, con los que puedes montar 20 Deadwalker Zombies. Estas miniaturas vienen acompañadas de 20 peanas Citadel redondas de 25 mm.
